La casta al palo
El sacudón que Kueider nos dejó.
[Ley Bases]
•×Laura Terenzano
© Edgardo Kueider
A contramano de los discursos hegemónicos, apareció la casta y le dio a Javier Milei lo que necesitaba. Entre Ríos en la agenda nacional.
El senador nacional Edgardo Kueider llevó a la provincia a lo más alto de la agenda setting de la política nacional. Todos, o casi todos los medios mainstream de la capital se ocuparon del concordiense. Lo que dijeron, eso es otra cosa.
La única verdad es la realidad y lo que mostraron las últimas 48 horas es que en Entre Ríos lejos estamos de conseguir un salto de calidad en los estamentos de la política. El senador Kueider, que llegó al poder de la mano del PJ, se comportó a contramano de las súplicas de sus compañeros y compañeras militantes y de la dirigencia misma. ¿Estamos, acaso, ante el fin de los mandatos partidarios? Las lealtades políticas hace rato que no existen.
Es muy probable que a Kueider poco le haya importado la reacción de sus colegas. Desde Paraná, Gualeguaychú, Concordia, Federación – y las firmas siguen-, llegaron repudios a su apoyo a la ley bases y pedidos de desafiliación y expulsión. El que dio el primer paso fue el diputado nacional y mentor político de Kueider, Gustavo Bordet. Aunque el ex gobernador no fue tan allá, solo repudió su firma al dictamen y habló de “estafa electoral”.
Algunos descreen de su palabra. De la de Bordet. Algunos afirman, de manera incomprobable, que todo estuvo acordado y que la firma de Kueider se estampó para proteger judicialmente al ex gobernador, que enfrenta una causa judicial por su patrimonio. Ya en nada podemos creer.
¿En qué lugar queda la esperanza de que las nuevas generaciones se involucren en política? Difícil saberlo aún. La casta más viva que nunca sigue comportándose funcional a los intereses de unos pocos desoyendo los alaridos de algunas mini multitudes que todavía esperan en retorno de lo que hace rato no aparece en la Argentina: la justicia social.
Kueider y la ley bases
La firma del dictamen de la ley ómnibus desató la furia de los peronistas, que le habían pedido que no acompañe el proyecto de Milei. Ardieron los chats.
Aunque no sorprendió, la confirmación del acercamiento de Kueider con el gobierno nacional terminó de zanjar una brecha que el propio senador se había encargado de alimentar, cuando quemaba la discusión por la ley bases en la Cámara Alta. Sus coterráneos del Partido Justicialista le habían pedido que no vote a favor y hasta algunos intendentes se reunieron con él para sumarse al pedido.
Kueider desoyó y firmó dictamen de la comisión de Asuntos Constitucionales que preside.
Bordet le soltó la mano
El más duro de todos fue quien supo ser el mentor político de Kueider. Bordet salió a despegarse de la decisión del senador y aseguró que hace tiempo que están distanciados. Esa distancia se originó cuando el senador rompió con el bloque de Unión por la Patria y fundó Unidad Federal.
Bordet habló de estafa electoral y recordó que Kueider llegó al Senado de la Nación bajo el paraguas del Frente de Todos. “Yo marqué mi desacuerdo, porque cuando uno presenta una propuesta electoral no puede defraudar a los electores”, dijo en declaraciones a un medio local. “Resultamos electos, teníamos un mandato de representar al 44,5% que eligió a Sergio Massa, que sostuvimos en la Cámara de Diputados cuando rechazamos todo tipo de apoyo a la Ley Bases, porque es contraria a nuestra plataforma electoral y tiene elementos que van a ir contra sectores de la población que están sufriendo este ajuste de forma brutal”, explicó.
El diputado nacional fue contundente y repitió que no comparte la viabilidad del dictamen. Contó también que tuvo diálogo con Kueider, pero “por otros temas”. “En ese momento el gobierno había vuelto a comisión la Ley Bases, por eso no hablamos del tema. Con posterioridad, el gobierno viene con esta versión acotada pero igual de perjudicial”, justificó.
Qué negoció Kueider
Luego de la firma del dictamen, Kueider dejó trascender que su apoyo a la ley bases fue a cambio de avanzar en la provincialización de Salto Grande. En los hechos, de lo que se trataría es de una compra directa en Entre Ríos por parte de las distribuidoras. Para eso, se debería crear una empresa comercializadora entrerriana que se encargue del paso administrativo que hoy deriva en CAMMESA, la empresa estatal que compra la energía a las generadoras y las distribuye en todo el país. Todo un desafío que suena lejos en el tiempo. El senador ya tiene presentado un proyecto de ley para eso.
Por ahora, el entrerriano solo firmó el dictamen, que habilita al gobierno nacional a tratar la ley en el recinto. Su comportamiento con el voto es todavía dudoso aunque ciertas pistas ya aparecieron.
